Eugenia de Montijo, la primera “It-Girl” española con mayor proyección internacional

Eugenia de Montijo

En pleno casco histórico de Toledo descubrimos el Hotel Eugenia de Montijo Autograph Colletion, un hotel boutique de cinco estrellas, situado en el que fuera palacio de la emperatriz consorte Eugenia de Montijo, durante el siglo XIX. El hotel de lujo del grupo Fontecruz, inspirado en los grandes hoteles del siglo XX, evoca la época dorada de la emperatriz en la corte parisina y nos ofrece un recorrido, en cada una de sus estancias, por la vida de una de las primeras propulsoras de la alta costura. ¿Pero quién es realmente Eugenia de Montijo?

“Déjate sorprender por los encantos de un hotel de alta costura en pleno centro histórico de Toledo de la mano de la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha.”

Nacida en Granada, en 1826, hermana de la Duquesa de Alba y mujer de Napoleón III, Eugenia de Montijo se puede considerar uno de los rostros más influyentes de los inicios de la moda parisina.

La importancia de la figura de la emperatriz ha transcendido a la actualidad por ser una mujer adelantada a su tiempo y fuente de inspiración para el mundo de la cultura, la moda y el arte. Su legado más importante ha sido la creación del miriñaque, un armazón de aros metálicos que liberaba a las mujeres de las enaguas, estilizando de esta forma sus figuras.

En cada rincón del hotel se respira historia, prueba de ello es su fachada y estructura renacentista que data del siglo XVI. Nada más entrar nos encontramos con una cúpula vitral en el vestíbulo, suelos de mosaicos de mármol y un gran tapiz de cristales bordados con un retrato de Eugenia de Montijo dando la bienvenida a los huéspedes. En el mostrador se pueden apreciar detalles ornamentales que nos transportan a los complementos que se lucían en aquella época: mantilla, encaje Chantilly, falda de volantes… Un motivo más para visitar el hotel es su interpretación de las lámparas en forma de collar y los apliques diseñados con un guiño al corsé.

Imagen eliminada.

Sus 40 habitaciones con doseles, mobiliario clásico y pinceladas de color azul turquesa (color favorito de la emperatriz y décadas más tardes inspiración para la elección del color oficial de la marca Tiffany & Co) están pensadas para ofrecer la máxima comodidad y hacer de la estancia una experiencia sensorial e inolvidable.

Imagen eliminada.

Desayunar y viajar en el tiempo es posible gracias al espacio Dressing, donde espejos y telas nos evocan al clóset de la emperatriz. El diseño de las mesas “silhouette” nos recuerda a los vestidos de la alta burguesía del siglo XIX. Si continuamos nuestro recorrido por el Lobby Bar nos encontramos ante un espacio ambientado en las fiestas aristócratas del Palacio del Elíseo, los conciertos en las Tullerías o los aromas del verano en Biarritz. En el se pueden degustar cócteles de autor como el “3C” a base de cítricos (naranja, lima y pomelo) o el “Eugenia de Montijo” elaborado con ginebra premium 1085 y que supone una reinvención de los sabores dulces predilectos de la emperatriz.

Imagen eliminada.

Una extensión del Lobby es el Mazapán Corner, un ambiente singular creado para exponer dulces emblemáticos de la gastronomía toledana, como son los mazapanes, de la mano del emblemático obrador Santo Tomé.

El nombre del restaurante, Federico, brinda homenaje a su modisto por excelencia, Charles Frederick Worth. Este establecimiento nos ofrece una auténtica propuesta gastronómica, con una cocina de sabores tradicionales y productos de proximidad, en un entorno íntimo.

Como broche final a la estancia, el Hotel Eugenia de Montijo presenta un spa erigido sobre vestigios del alcantarillado romano y los arcos del palacio gótico-mudéjar del siglo XV. ¡Un viaje a la relajación, con una mirada al pasado! Las instalaciones se dividen en dos estancias: una destinada a los tratamientos corporales y otra al círculo del agua, saunas, camas calientes y hammam.

Sin duda, alojarse en uno de los hoteles de la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha supone un valor añadido en la experiencia turística, gracias a su compromiso con la idiosincrasia del entorno, conservación de la cultura, el patrimonio y las tradiciones. En definitiva, se trata de una invitación para conocer Toledo, la ciudad de las tres culturas, y todos los encantos que ofrece al visitante.

Imagen eliminada.